Cuando Esperanza concluyó su razonamiento, volvió los ojos atrás y vio a Ignorancia que los seguía, y dijo a Cristiano: |
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| Poca pena se da ese joven por alcanzarnos. | |
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| Ya lo creo; no le gusta sin duda nuestra compañía. | |
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| Pues creo que no le hubiera venido mal el habernos acompañado hasta ahora. | |
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| Esta es la verdad; pero apuesto a que él piensa de muy diferente manera. | |
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| Sí, lo creo; sin embargo, esperémosle. | |
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| De acuerdo | |
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